"El capitán miró a Fermina Daza y vio en sus pestañas los primeros destellos de una escarcha invernal. Luego miró a Florentino Ariza, su dominio invencible, su amor impávido, y lo asustó la sospecha tardía de que es la vida, más que la muerte, la que no tiene límites.
–¿Y hasta cuándo cree usted que podemos seguir en este ir y venir del carajo? –le preguntó.
Florentino Ariza tenía la respuesta preparada desde hacía cincuenta y tres años, siete meses y once días con sus noches.
—Toda la vida —dijo."
Gabriel García Márquez,
El amor en los tiempos del cólera
Por darle otro sentido a la lectura, porque sólo un genio es capaz de concentrar en unas líneas tanto sentimiento. Inolvidable Gabriel García Márquez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario